domingo, 1 de julio de 2012

Queridos lectores, hace unos meses el consell consiguió eliminar la prohibición de recalificar montes quemados, poco después, camuflada entre la miríada de recortes aquí y allá, se reducen drásticamente los recursos de los operativos antiincendios… hace tres días se declara un incendio incontrolable en la Comunidad Valenciana, y después otro y después otro… ¿Nos quedará indignación para cuando comiencen a echar hormigón sobre las tumbas calcinadas de nuestros bosques en un intento de salir de una situación en la que nos metieron precisamente por hacer eso mismo?
La tragedia natural es inabarcable, el olor a cenizas no se nos va de la nariz mientras contemplamos ese cielo alienígena que sólo refleja la devastación que tenemos al lado, pero se torna aún más nauseabundo cuando ese otro olor a chamusquina prende del corazón ¡Qué hijos de puta!

TIRA 362